EN ELLO



 Entrecierra los ojos ante el flujo de palabras garabateadas en grafito.

"Mierda", murmura, abriendo la navaja. La hoja destella brevemente a travĂ©s de la punta de un lápiz nĂşmero 2 de color amarillo brillante, dejando una punta perversamente afilada. Luego ordena sus pensamientos, respira y vuelve a caer en la página.

El vampiro se filtra desde las sombras como un aceite fĂ©tido y repugnante, deslizándose por los antiguos adoquines. No proyecta sombra cuando cruza el callejĂłn iluminado por la luna, y no hace ruido cuando se acerca a ella. Se da la vuelta de repente, sus ojos aterrorizados se encuentran con la mirada hipnĂłtica de la criatura. Alcanza su garganta con una mano en forma de garra y Luthor Hardington sale de detrás de un poste de luz.

"No".
Luthor Hardington? Suena como una estrella porno o algo asĂ­. Hagámoslo Luthor Hawk. Si. Y una farola es endeble, usemos un carruaje en su lugar. El lápiz vuelve al papel y Ă©l vuelve a caer en la página.

Alcanza su garganta con una mano parecida a una garra cuando Luthor Hawk sale de detrás de un carruaje estacionado. "¡Atrás, inmundo demonio!" grita mientras levanta la ballesta. El rayo plateado parpadea brevemente a la luz de la luna antes de detenerse en el pecho del vampiro. Gime horriblemente y mira al cazador de vampiros que finalmente lo ha derrotado.

"TonterĂ­as".
No puede simplemente matar la cosa tan rápido, ha habido demasiada acumulaciĂłn. Hagámoslo trabajar un poco. El grafito llena más parte de la página cuando vuelve a caer.

Gime horriblemente y mira con odio al cazador de vampiros mientras agarra el cerrojo. Tirando con fiereza, saca la temida plata de su pecho. El perno cae sobre los adoquines con un sonido frĂ­o y duro, con carne colgando de las diminutas pĂşas. El vampiro sonrĂ­e horriblemente y comienza a saltar hacia adelante. Pero Luthor Hawk tambiĂ©n salta hacia adelante, y las dos formas chocan en el centro del callejĂłn. Las hojas gemelas plateadas montadas en la parte delantera de la ballesta se clavan silenciosamente en el corazĂłn de la criatura mientras Luthor murmura "Nunca fallo dos veces". Y luego el vampiro vuelve a caer en las sombras cuando Luthor se gira para mirar a su amada. Ella toma su mano y sus ojos se encuentran.

"Sí, eso no está mal".
Es hora de darle un final cursi para aligerar toda la tensiĂłn. Tal vez deje una pequeña pista al final de que el vampiro no está realmente muerto despuĂ©s de todo, pero nada demasiado obvio. El lápiz se encuentra con la página y Ă©l cae dentro.

Ella alcanza su mano y sus ojos se encuentran. Volviendo hacia la calle principal iluminada por lámparas, sonrĂ­en exhaustos, sabiendo que el horror finalmente ha terminado y llegará un nuevo dĂ­a. Detrás de ellos llega el dĂ©bil roce de las garras sobre los adoquines. Y luego grita cuando el vampiro agarra a Luthor por el cuello y lo lanza por los aires.

"Guau".
Eso no es muy sutil. De donde vino eso? Eso no es lo que quise escribir. Su mano tiembla ligeramente mientras mira por un momento el lápiz nĂşmero 2 de color amarillo brillante. ReĂşne sus pensamientos y vuelve a caer.

Detrás de ellos llega el dĂ©bil roce de las garras sobre los adoquines. Y luego grita cuando el vampiro agarra a Luthor por el cuello y lo lanza por los aires. Aterriza con un sonido brutal contra los adoquines y se queda inmĂłvil. El vampiro cae sobre Ă©l, rechinando los dientes con avidez a la luz de la luna. Y luego la garganta de Luthor es arrancada y la sangre de su vida se derrama sobre los antiguos adoquines, brillando hĂşmedamente a la luz de la luna.

Salta hacia atrás de la página. ¡¡¿QuĂ© diablos está pasando aquĂ­?!! AsĂ­ no es como se supone que debe ir. Todo esto está mal. ¿Que esta pasando aqui? Se mira la mano, que ahora tiembla mucho mientras agarra el lápiz. La punta se ha desafilado, los bordes de la madera comienzan a rayar un poco el papel. La navaja parpadea brevemente antes de volver a su lugar en el escritorio, el lápiz ahora una vez más amenazadoramente afilado. Traga lo que le queda de cafĂ©, agarra el lápiz con firmeza y vuelve a caer en la página.

Y luego la garganta de Luthor es arrancada y la sangre de su vida se derrama sobre los antiguos adoquines, brillando hĂşmedamente a la luz de la luna. La criatura levanta la cara para encontrar una nueva figura de pie en el callejĂłn iluminado por la luna. El hombre está vestido de manera extraña, temblando de terror y mirando a su alrededor como si su mente se hubiera ido. En su mano hay un lápiz No.2 de color amarillo brillante. "DeberĂ­as haberte agarrado a la navaja", sisea la criatura, saltando hacia adelante. El vampiro golpea a este nuevo intruso contra las duras paredes de ladrillo del callejĂłn, mirándolo con una intensidad horrible. Se lanza hacia su cuello, los dientes brillan hĂşmedos a la luz de la luna. Y luego comienza a gritar como un loco mientras se tambalea hacia el centro del callejĂłn, la mitad delantera rota del lápiz sobresale de su pecho, directamente sobre el corazĂłn. Da vueltas salvajemente allĂ­ a la luz de la luna, como un murciĂ©lago gigantesco elegido para bailar. Pero una danza horrible, una danza de angustia y tormento. Sus terribles gritos resuenan en el callejĂłn, y el hombre con la mitad rota de un lápiz amarillo No. 2 todavĂ­a agarrado en su mano pierde lentamente el conocimiento y cae al suelo.

Agarrando su silla volcada como apoyo, se levanta tambaleándose del suelo de la sala de estar. Enderezando la silla, se sienta temblando ante el papel cubierto de grafito. "¡Estoy de vuelta FUERA!" Su respiraciĂłn irregular comienza a disminuir un poco. ¡Gratis! ¡A quiĂ©n le importa lo que acaba de pasar, siempre y cuando Ă©l estĂ© FUERA! Casi puede creer que en realidad nunca sucediĂł, que fue solo un sueño de algĂşn tipo.

Arroja la mitad rota del lápiz sobre el papel y lo observa rodar de un lado a otro por un momento. Comienza a preguntarse... si no hubiera salido, ¿realmente lo habrĂ­an matado? ¿EstarĂ­a realmente muerto en este momento? En el fondo de su mente sabe la respuesta, pero aĂşn no está listo para lidiar con eso, por lo que sus pensamientos se vuelven hacia otras cosas. Ahora que está fuera... ¿el vampiro sigue ahĂ­, esperándolo? ¿TodavĂ­a existe? Cree que tambiĂ©n sabe la respuesta a esa pregunta. Y luego recuerda a la chica.
"UH oh."
No puede estar seguro de si ella todavĂ­a está en peligro o no. Probablemente saliĂł del callejĂłn mientras Ă©l estaba siendo atacado. No puede estar seguro. Todo habĂ­a sucedido tan rápido. Pero sĂ­, probablemente se escapĂł. Probablemente.
Mira fijamente la mitad rota del lápiz. No es muy largo. Pero tal vez quede suficiente para afilar. Recoge la navaja y las astillas de madera comienzan a caer sobre la mesa. El trozo afilado ahora mide apenas dos pulgadas de largo, y Ă©l tambiĂ©n considera colgarse de la navaja automática. Pero sabiendo en el fondo que no le ayudará, lo tira a un lado. Mira fijamente el cabo del lápiz, su punta mortalmente afilada... y la goma de borrar. Y luego vuelve al papel, respira hondo y vuelve a caer en la página.

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