Padre Santo, quiero suplicarte en esta hora, que envíes a los arcángeles San Rafael, San Gabriel y San Miguel sobre este lugar
(invítalos para que desciendan sobre tu casa, oficina, empresa, etc.)
Los acojo y los recibo en mi casa y en mi familia para que con su presencia me guíen para hacer siempre la voluntad de Dios.
Hoy te pido que batallen por mí en este camino incierto, en esta oscuridad, confío en la misericordia de Dios, que enviará sus Ángeles como dice la promesa.
“No te sobrevendrá ningún mal, ni la enfermedad llegará a tu casa; pues él mandara que sus ángeles te cuiden por dondequiera que vayas”. Salmo 91, 10-11.
Hoy reclamo la presencia de estos príncipes celestiales, San Miguel, San Rafael y San Gabriel para que me ayuden a salir de esta situación. (Hacer aquí la suplica, entrégale tu petición). En el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que Vive y Reina por los siglos de los siglos. Amén.
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